Mónica Cavazos
La seducción es un proceso lento,
me lo enseñó aquel hombre que
jamás se acostó conmigo.
Señorita Vodka,
Susana Iglesias
No quiero ni tocarte con ese vestidito. ¿O es blusa? Me encanta la transparencia de las mangas. Que deje tu cuello libre desde los hombros porque me gusta besar las hendiduras que forman tus clavículas. Y el escote. Se ven deliciosas las curvas de tus pechos asomándose. Ya dime, ¿de qué se trata?
Adivina.
Es que no sé. La tela es tan suave. Se resbala entre mis dedos. ¿Seda?
Piensa en los gusanos.
Ni loco pensaré en ellos. No imaginé que me gustarían tanto las flores artificiales. Siempre dije que nada como lo natural y ahora estoy embriagado con el aroma de las flores de tu vestido.
¡Qué cursi eres!
Dime que el calzoncito tiene una flor al frente. Serán los pétalos con el mejor olor del universo. Es la misma tela, ¿verdad? Se siente igual de suave.
Y no te imaginas lo pequeño. Levántame el vestido o asómate debajo. Son unos centímetros apenas lo que cubre.
Tan diminuto como el vestido. Lo más grande es el cinturón. En su honor, de ahora en adelante el palo de rosa será mi color favorito.
Deja de cachondear y ya adivina de qué me disfracé para tu cumpleaños.
Mmmhhh, te hiciste un peinado diferente. Ese chongo te queda muy bien. También te maquillaste diferente. ¿Tiene algo que ver?
Todo tiene que ver.
Tu cara está muy blanca. Me gusta como resalta el rojo de tus párpados y de tu boca. Me recuerda a las cerezas.
Caliente…
¿Cómo hiciste para pintar esas flores en tu cara? Son una obra de arte. Y en el cuello. Parece como si trajeras un collar hecho de ramas y flores. Muero por besarte pero no quiero echarlo a perder.
¿No te imaginas de qué son las flores?
¿Cerezo? Si lo son, le atiné, nunca he visto uno.
Menso. Vas bien.
¡Ya sé! ¡Eres un animé!
Calientito. ¡Más que eso! Hierves.
Pero no, las animé usan botas negras.
Botas ¡jamás! Hasta me compré tacones nuevos. Son tu regalo de cumpleaños. Soy una geisha. ¡Ve nada más qué putiestilo!